Pregón de Blanca Portillo en San Isidro 2009

Este es el texto casi íntegro del pregón que la actriz madrileña Blanca Portillo dio en la plaza de la Villa el pasado miércoles como pistoletazo de salida a las fiestas de San Isidro 2009.

«Mis queridos amigos, madrileños todos, los de dentro y los de fuera (qué ganas tenía de decir esto, aunque solamente fuera una vez en la vida). Antes que nada, decir que es un honor estar aquí esta tarde. No es fácil, en una ciudad tan grande, ser elegida pregonera. Otros que han nacido en lugares más pequeños tienen más probabilidades de ser elegidos para ello, o de ser nombrados hijos predilectos, o de que les den las llaves de la ciudad, o su peso en vino. En Madrid, esto es todo un logro.

Me siento tremendamente feliz. Primero que nada, porque soy madrileña, sí. Aunque muchos se empeñen en decir que en Madrid no hay madrileños, hay que decirles alto y claro que sí, que somos como las meigas, que haberlas hailas. Soy madrileña por los cuatro costados: hija y nieta de madrileños.

(...)
Uy qué caro es Madrid. Pero si es que somos muchísimos, cómo no va a ser caro, que hay muchísimos gastos. En fin, que a todos los que no opinan bien de Madrid, hoy quiero invitarles más que nunca a vivirlo, a disfrutarlo y a gozar de él.

[Una mujer grita "Y que nos quiten los parquímetros", y Blanca responde "Eso también"]

Madrid está lleno de sitios hermosos, de rincones inolvidables, de museos, de teatros, de bares, de cines, de música, de alegría y de generosidad. Las ciudades no las hacen los políticos, sino sus gentes. Y ese es mi deseo: hoy y para siempre, que sigamos siendo como somos, como siempre hemos sido.

Me gusta ser madrileña: me gusta Madrid, el Madrid de hoy, el que nos ha tocado vivir. No tengo nostalgia del pasado y quiero mirar a Madrid hacia el futuro y seguir haciendo de ésta una ciudad abierta y generosa, y seguiré a su lado como ciudadana, como persona y como profesional.

Hoy empieza nuestra fiesta, nuestro momento de celebración, yo quiero comenzarlo con un beso a todos los madrileños y, en especial, a ese maravilloso músico y poeta que se nos fue ayer: Antonio Vega.

Llena de buenos deseos y de alegría en el corazón. Vamos a pasarlo bien, vamos a gozar. El ayuntamiento ha invertido dos millones de euros de nuestros impuestos para que así lo hagamos, pues hagámoslo.

Sed generosos vosotros también y compartid vuestra alegría en estas fiestas con todas aquellas personas con las que os crucéis.

¡Viva San Isidro, y que viva Madrid!»